Muchas personas experimentan una gran dificultad para encontrar pareja. El ser humano es un animal social por naturaleza, tenemos la necesidad innata de estar acompañados por otras personas y establecer vínculos sociales y afectivos. Así, aunque no todas las personas tienen las mismas necesidades afectivas, por lo general tendemos a buscar cariño. Se trata hasta cierto punto de una convención social, y en ocasiones incluso de una solución instrumental; en este sentido, no son raras las parejas que se forman por mera conveniencia, exista o no amor entre ellos. Muchas veces estas relaciones se basan en el miedo a la soledad, la conveniencia económica, o cualquier otro motivo. Así, aunque existen excepciones, la mayor parte de las personas siente la necesidad de establecer una relación sentimental de pareja. Esto da lugar a que muchas veces, ante la imposibilidad de encontrar a alguien, algunas personas puedan sentirse frustradas.
Admirar a estas chicas, las protagonistas de «Girls», a lo largo de los capítulos de la serie manteniendo una amistad a veces resultaba casi grotesco. Son estas amistades las que nos moldean desde pequeños. Comenta Nadia del Real, psicóloga del Centro TAP, que nuestros amigos son «casi» nuestra primera forma de relacionarnos con el globo, y que gracias a ellos empezamos a valorar la importancia del compromiso, la lealtad, la confianza, los secretos o la afinidad. La amistad tóxica Pero, al igual que nos pasa con nuestras parejas, o a veces nuestros familiares, llega un momento en que las amistades pueden deteriorarse, aun llegar a convertirse en relaciones tóxicas.