Buscar Agradecimientos Como siempre, estoy en deuda con mucha gente por la ayuda experta y los consejos que me han proporcionado para la preparación de este libro, y en especial con: En Inglaterra: los profesores Tim Burt, Maurice Tucker y Mark White de la Durham University; el reverendo Nicholas Holtman de la iglesia de St. Y por encima de todo, como siempre, mi mayor agradecimiento a mi querida e infinitamente paciente esposa, Cynthia. Estaría a unos quince metros de altura, lo que en medio de Norfolk casi siempre es garantía de unas buenas vistas. Justo delante de mí tenía la antigua iglesia de muros de sílex a la que nuestra casa había estado asociada en su día. A lo lejos, en la otra dirección, se alzaba la abadía de Wymondham, un conglomerado de esplendor medieval dominando el horizonte sureño.
Yo por el contrario me considero un hombre normal del montón, bastante achicopalado al que le cuesta un globo entablar conversación con el sexo opuesto. Si ese primer año de facultad estuve con alguna chavala no fue gracias a mí pericia o mi forma de ser, sino a mi amigo Fernando que conseguía que sus conquistas buscaran a una amiga para mí, y con alguna que otra tuve la suerte de poder actuar algo. Tras las presentaciones de austeridad nos fuimos a ver a mis colegas para presentarles a Fernando, echar unas cervezas y ver qué planes había para ese fin de semana. Ya en la calle Fernando me abordo sobre lo hermosa y joven que era mi madre, en un principio le llame la atención ya que me molesto que se fijara en mi madre como una alguien. El al ver que me fastidiaba se sonrió y me pregunto si acaso no era cierto, y lo calladito que me lo tenía, yo no dije nada preferí dar la callada por respuesta con la expectación de que Fernando lo dejase estar, pero estaba claro que Fernando no pensaba dejarlo y que le gustaba pincharme con el tema y la verdad es que lo estaba consiguiendo, siguió alabando los atributos de mi madre, lo malo que se pondría el tener que compartir casa con una mujer de bandera como ella y no poder follarsela.
